La amplia formación técnica y los conocimientos sobre la tradición unido a su carácter abierto e investigador, ha sido lo que ha motivado la petición de la Federación Mundial de Tai-Jitsu (WTJF) al Maestro Hiroo Mohiziki para aceptar el cargo de Consejero y Asesor Técnico de la misma.
En su escrito de aceptación, remitido el pasado mes de diciembre, el Soke Hiroo Mochizuki, único depositario de la autoridad de la Escuela de YOSEIKAN, recuerda que presta siempre una gran atención a la calidad en la transmisión de las enseñanzas marciales de su familia. Añade que los motivos que le llevan a aceptar dicha responsabilidad en la WTJF son, principalmente, el aprecio por la amistad, sinceridad y hospitalidad, observadas personalmente, en esta Organización Mundial de Tai-Jitsu, y las cualidades de rigor en su enseñanza y de su apertura a la vez.
El maestro Hiroo Mochizuki es hijo del maestro Minoru Mochizuki (1907-2003), descendiente de una familia de Samurais, llegó a ser uno de los más reputados artistas marciales japoneses, reconocido mundialmente como uno de los más importantes budokas del siglo XX. Practicó con los mejores maestros de Japón (Moriehi Ueshiba, Jigoro Kano, Gichin Funakoshi, etc.) y conservó buena pare de las antiguas técnicas que enseñaban los maestros Saigö Tanomo (1829-1905), Takeda Sokaku (1860-1943), etc.
Hiroo Mochizuki es actualmente el SOKE de la escuela Yoseikan, fundada por su padre en Sizuoka en 1931, quien le entregó en el año 2000 este título que no es hereditario. El título de Soke en japonés designa al único depositario de la máxima autoridad o cabeza de una escuela antigua de Artes Marciales. Su responsabilidad es velar por la permanencia y correcta transmisión de las enseñanzas marciales de la escuela y sus técnicas y es la única persona que puede expedir los títulos de máximo nivel.
Después de más de 20 años tratando de seguir la práctica del Tai-Jitsu según los principios del Maestro Minoru Mochizuki, ahora bajo la dirección técnica de su hijo Hiroo, seguro que se va a dar un importante salto de calidad en el trabajo técnico y un mayor rigor en los conocimientos de la verdadera historia del Tai-Jitsu, sus Katas tradicionales y su espíritu marcial.
Según indican desde la propia Federación Mundial de Tai-Jitsu, “después del curso realizado con el Soke Hiroo Mochizuki en octubre Oviedo, nos hemos dado cuenta de que la línea que habíamos seguido hasta ahora era poco rigurosa en la técnica y en la historia, y muy interesada en lo económico, algo que nos duele reconocer después de tantos años, pero que estamos encantados de descubrir, sobre todo por las puertas de conocimiento y de futuro que se nos abren de la mano del Maestro Hiroo Mochizuki”.
En el transcurso del año, que ahora comienza, están previstos varios cursos y encuentros con el Soke Mochizuki, en los que se revisarán todos los aspectos intrínsecos a esta disciplina marcial Japonesa.
Joaquín Muñiz
www.tai-jitsu.com
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